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Etiqueta: Impuesto sobre Sociedades

  • Sanción régimen FEAC anulada por vulnerar el principio de proporcionalidad

    La multa de 10.000 euros por comunicar tardíamente el régimen FEAC ha sido recientemente anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Esta sentencia de julio de 2025 cambia las reglas  para miles de empresas que realizan operaciones de reestructuración.

    ¿Tu empresa hizo una fusión, escisión o aportación de activos y comunicaste tarde el régimen especial? Hasta ahora, la Agencia Tributaria aplicaba automáticamente una sanción fija de 10.000 euros. Sin embargo, el TSJ acaba de establecer que esta práctica vulnera el principio de proporcionalidad.

    Por qué se anula la sanción del régimen FEAC

    El artículo 89 de la Ley del Impuesto sobre Sociedades establece que las operaciones de reestructuración empresarial se acogen por defecto al régimen fiscal especial de neutralidad. No hace falta optar expresamente. Solo hay que comunicarlo en tres meses.

    Pero ¿qué pasa si comunicas fuera de plazo?

    La Administración Tributaria venía imponiendo una sanción fija de 10.000 euros por cada operación no comunicada, sin distinguir entre falta absoluta de comunicación y presentación tardía. Esta rigidez acaba de caer.

    El TSJ analiza un caso donde una empresa presentó la comunicación ocho meses tarde, pero voluntariamente y antes de cualquier requerimiento. La Administración impuso la sanción automática sin valorar que no hubo perjuicio económico ni ánimo defraudatorio.

    La sentencia es contundente. El tribunal establece que imponer una sanción fija sin posibilidad de modulación vulnera el principio de proporcionalidad cuando la conducta no causa perjuicio a la Hacienda pública.

    ¿Por qué no hay perjuicio? Porque desde 2015 el régimen FEAC se aplica por defecto salvo renuncia expresa, por lo que la comunicación es un requisito meramente formal cuyo incumplimiento no afecta a la aplicación del régimen.

    Cuándo aplicar el régimen FEAC sin sanciones

    El régimen fiscal especial de neutralidad permite realizar fusiones, escisiones, aportaciones de activos y canjes de valores sin tributación inmediata. Es una herramienta fundamental para reestructurar empresas de forma eficiente.

    No se exige optar expresamente por este régimen para su aplicación. Simplemente opera. Pero hay un único requisito formal: comunicar a la Agencia Tributaria qué operación hiciste.

    El plazo es de tres meses desde la inscripción de la escritura pública en el Registro Mercantil o desde su otorgamiento si no requiere inscripción.

    Hasta ahora, la normativa establecía que la falta de comunicación constituye infracción tributaria grave sancionable con multa fija de 10.000 euros. El matiz clave: la norma no distinguía entre no comunicar nunca y comunicar tarde.

    El TSJ introduce ahora proporcionalidad. La sentencia se apoya en jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea y del Tribunal Supremo que establece que las sanciones no deben ir más allá de lo necesario para garantizar la recaudación y prevenir el fraude.

    ¿Resultado? Si presentaste la comunicación tarde pero voluntariamente, sin perjuicio económico y sin intención defraudatoria, tienes argumentos sólidos para impugnar la sanción.

    Cómo proteger tu empresa del régimen FEAC

    La sentencia no elimina la obligación de comunicar. Tampoco convierte la comunicación tardía en algo deseable. Lo que hace es introducir sentido común en un sistema que aplicaba sanciones automáticas.

    En Confianz, cada semana vemos empresas que realizan operaciones de reestructuración sin asesoramiento fiscal especializado. Firman la escritura, la inscriben en el Registro Mercantil y se olvidan de comunicar el régimen FEAC a Hacienda.

    Tres meses después llega la sanción. Y hasta ahora, no había defensa posible.

    Esta sentencia abre una vía. Pero requiere trabajo. Hay que demostrar tres elementos clave: presentación voluntaria antes de requerimiento, ausencia de perjuicio económico y falta de ánimo defraudatorio.

    El TSJ recuerda que la normativa ya prevé una cláusula antiabuso para supuestos de fraude. Si hay fraude, Hacienda puede inaplicar el régimen y eliminar la ventaja fiscal. Pero si no lo hay, la sanción automática no se sostiene.

    Un dato relevante: el TSJ no admite el argumento de perjuicio en el control tributario cuando la comunicación se presenta antes del vencimiento del plazo de declaración del Impuesto sobre Sociedades.

    La realidad práctica: esta es una sentencia de un Tribunal Superior de Justicia, no del Tribunal Supremo. Por tanto, no establece jurisprudencia vinculante para toda España. Pero sienta precedente.

    ¿Tienes una sanción por comunicación tardía del régimen FEAC? Revísala. ¿Cumples los requisitos que valora el TSJ? Entonces tienes opciones de impugnación.

    ¿Vas a hacer una operación de reestructuración? No improvises. El régimen FEAC tiene requisitos sustantivos más allá de la comunicación. Hace falta demostrar motivos económicos válidos, porque la ausencia de estos puede implicar la inaplicación del régimen Fiscal Impuestos.

    En Confianz diseñamos operaciones de reestructuración que cumplen todos los requisitos desde el principio. Comunicaciones en plazo, documentación de motivos económicos válidos y seguimiento de plazos. Porque anticiparse sale más barato que corregir.

    La sanción automática de 10.000 euros ya no es tan automática. Pero eso no convierte la comunicación tardía en una opción razonable. Hazlo bien desde el principio o tendrás que pelearlo después.

    Contáctanos para poder asesorarte.

  • What is a large company for tax purposes in 2025

    The Tax Agency has drawn a clear line: any company with an annual turnover exceeding €6,010,121.04 is considered a large company. This figure is not calculated on the basis of profits or net income, but on total turnover. And the change in status is immediate: if you exceed this threshold this year, you will be a large company next year.

    This volume is calculated by adding up all deliveries of goods and services provided, including those exempt from VAT. Tax payments and occasional transactions such as the sale of real estate or assets are not included. Financial transactions and certain agricultural or livestock activities that are taxed under special regimes are also not counted.

    Crossing this threshold changes a lot. It is not just a matter of invoicing more. From then on, the tax authorities expect a different way of operating. Failure to adapt can lead to penalties, management errors or even liquidity problems.

    What it means to be a large company in tax terms

    Once your company is considered a large company for tax purposes, everything changes: deadlines, how to file returns, your relationship with the administration… It’s a leap in level. These are the main consequences:

    • Monthly returns. It is no longer enough to file them quarterly. VAT (form 303) and withholdings (forms 111 and 115) must be submitted every month.
    • Mandatory SII. Immediate information provision requires keeping VAT records electronically, sending invoice data to the tax authorities almost in real time.
    • Electronic notifications. All official communications are made electronically. The company must have a digital certificate and pay attention to notifications.
    • Installment payments other than corporation tax. The system provided for in Article 40.3 of the Corporation Tax Act applies, which requires payments to be calculated on the basis of actual results for the financial year.

    In addition, many self-assessments must be submitted exclusively electronically, including forms as diverse as 200, 232, 349 and 720, among others. The list is long and leaves no room for error.

    Managing all this requires more than just technical resources. It requires solid tax organisation, cash flow forecasting and experienced teams. It is not uncommon for growing companies to find themselves overwhelmed after changing status.

    How to prepare to become a large company

    The best way to deal with the status of Large Enterprise for tax purposes is to anticipate it. If your company is approaching the threshold, it is advisable to carry out an internal tax review. What systems do you have in place to control invoicing? How is the accounting done? Are you prepared to file monthly returns without errors?

    An essential step is to digitise your processes. The use of accounting software adapted to the SII is no longer optional. You must also ensure that you have a valid electronic certificate and that your finance team is aware of the new deadlines.

    Another key point is cash flow. Filing and paying monthly can affect liquidity. Adjusting collection and payment schedules or planning corporate tax instalments well is vital to avoid financial stress.

    At Confianz, we help many companies that have taken this leap. We know that the problem is not only technical: it is organisational and strategic. That is why we not only comply, but also help you gain efficiency, avoid penalties and maintain control even when the tax pressure intensifies.

    Becoming a large company for tax purposes is much more than a change of category. It is a complete transformation in the way you interact with the tax authorities. Knowing what this entails, anticipating it and having a good tax strategy is what makes the difference between a company that adapts and one that struggles.

    At Confianz, we not only know the regulations, we also understand the reality of growing businesses. If you are close to the large company threshold, we can help you make the leap with confidence. Let’s talk.